viernes, 13 de enero de 2017

Él

Hoy hola, mañana adiós...

No hay nada peor que perder la confianza con alguien al que tomabas por familia, al que le rebelaste tus secretos y tus más íntimos recuerdos, alguien con quien disfrutabas en verano, jugando y brincando, alguien en el que  confiabas, del que no te separabas.
Fue él, el que te protegió ante unos matones y curó moratones, pero ahora ni un hola, tal vez solo adiós. Duele en el corazón como los recuerdos vienen a la mente y sin motivo alguno quedan permanentes con dolor, podría ser todo una tontería, pero en estos momentos lloro por eso, las tonterías de nada que  acaban siendo grandes batallas. Lágrimas descontroladas quieren que todo vuelva a ser igual, que tiernas palabras te pregunten cómo  estas, y que pequeñas sonrisas alegren el día, no palabras vacías y falsas sonrisas que te destrocen el alma.
 Brindo por esos tiempos en los que no habían celos, en los las risas eran imparables y daba igual lo que hacías, esos tiempos en los que no había incomodidad solo felicidad, esos tiempos en los que eramos amigos... tiempos en los que no te enamorabas en los que no te destrozaban, en los que llorar significaba una herida y no una apuñalada en el corazón, tiempos sin ignorancia y solo idiotez, tiempos en los que sabía estar callada sin revelar lo que sentía por él...

      By: Lucía Expósito G.        
 

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